PERSONAS DECENTES, Leonardo Padura
Personas decentes, la última novela de Leonardo Padura, lleva implícitos en cada página la magia y el talento de este gran escritor. Su argumento te envuelve, al tiempo que realiza un impresionante recorrido por los pensamientos, amarguras e ilusiones de los personajes.
Nos encontramos con Mario Conde, ya pasados los sesenta, que renegó de su pasado de policía hace tiempo, y que de nuevo se deja arrastrar a una investigación debido a su eterna lealtad hacia los amigos. Conde atesora en su interior una sensibilidad que conmueve al lector, y que hilvana sus relaciones de amistad y la de su amor de toda la vida, Tamara, aunque por otra parte dispone de una especial habilidad para las pesquisas criminales.
Padura nos lleva de la mano por las calles de la Habana durante la visita del presidente Obama, un momento que pudo ser crítico en la historia de Cuba. Utiliza a sus personajes para contarnos sus anhelos, sin perder la perspectiva de los años de dictadura, que han supuesto una lacra que les deja poco margen para la esperanza.
Personas decentes en una novela brillante en la que hueles, saboreas y casi puedes ver todo lo que el autor te va contando, pasas de página sin darte cuenta porque crees que en realidad estás allí, caminando al lado de Conde, bebiendo con él, sentado a la mesa como si fueras uno más de sus amigos, mirándole a la cara cuando escuchas sus pensamientos y deliberaciones, tanto personales como las que se refieren a la investigación criminal.
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